- Desaseo total en la administración de los recursos públicos, el tufo de la podredumbre cada vez es más escandaloso, “los cabos sueltos” no tardan en aparecer.
- La integridad y honestidad palidecen ante el cinismo extremo de Gaspar Díaz Falcón
Alfredo A. Calderón Cámara
La feroz insistencia de muchos “tumbapatos” que se dieran a conocer documentos proporcionados dadas sus obligaciones por Transparencia, todo en su exacta proporción para que el gobierno municipal de Macuspana cuestionado, no tenga pretextos o acuse de “puntos de fuga” o se alarme que tiene traidores; vale la pena aclarar que no se trata de “una cacería de brujas” ni existe algún sentimiento ingrato en contra de su alcalde; simple y llanamente es una investigación periodística y denuncias sociales, como seguirán haciéndose en otros municipios y dependencias oficiales.
Con la finalidad de dar certeza a la investigación periodística realizada, se reproducirá otra entrega de Armagedón de la semana anterior; ahora sí, exhibiendo documentos para que la sociedad vea la forma en que los salarios devengados por los amigos e incondicionales del alcalde Gaspar Díaz Falcón, son beneficiados. Aclaremos; los subalternos, parece ser que no tienen culpa alguna, pues “a la gorra no hay quien le corra”, aunque el presupuesto de Macuspana en esta administración tiene cierta similitud con un “tráiler accidentado en carretera dónde la rapiña se da sin misericordia”.
Es de tomar en cuenta que al transgredir el ordenamiento legal, llámese decreto del gobernador Javier May Rodríguez que ningún funcionario debe de ganar más que el gobernador y elevado a rango constitucional; pareciera que Gaspar Díaz Falcón esta cometiendo un delito y todos aquellos funcionarios que cobran en exceso por encima de lo estipulado en el decreto, también. Va, la segunda entrega.
La confianza que la sociedad de Macuspana le entregó al alcalde Gaspar Trinidad Díaz Falcón en las urnas en junio del 2024, fue para que él y su gabinete municipal honrara esa confianza y le devolviera a la política su vocación de servicio, no para que se sirvieran del poder otorgado para usarlo en contra de quienes votaron por él y menos para abusar llenando de nepotismo y dinero la familia de la primera dama, Guadalupe Frías Enríquez. La inconformidad es porque para eso ¡No votó Macuspana!
Es más, ni siquiera votaron por todos los funcionarios que cobran cantidades impresionantes y que pocos entienden el por qué cobran sueldos tan alejados de la realidad, ofensivos si se quiere por muchos están por encima de la prudencia con que Javier May desde la gubernatura predica con el ejemplo; botones de ejemplo hay demasiados, no obstante, en esta entrega se tratará de dar a conocer cargos y montos sin hurgar mucho en parentescos.
Dada la cantidad de funcionarios que sin haber luchado por el voto han sido premiados por el alcalde Gaspar Díaz Falcón sin que él mismo alcalde montado en su soberbia, explique: en la Dirección de Programación, el director Alejandro Zacarías Escobar, tiene un salario bruto mensual de 183 mil 582. 80 pesos, aunque ya con impuestos aplicados el monto de la remuneración sólo le queda en 140 mil 891.10 pesos un poco más de 50 mil pesos mensuales que el mismo gobernador del estado.
De acuerdo con los documentos oficiales del ayuntamiento de Macuspana, la directora de la Dirección de Atención Ciudadana, Cindy Paola Jiménez Zacarías tiene un sueldo bruto de 161 mil 797. 24 pesos, ya con impuestos aplicados, -humildemente-, sólo le quedan 128 mil 959.10 pesos, el columnista imagina que es por “la carga de trabajo”, la generosidad de don Gaspar Díaz da para eso y más.
Por su parte un coordinador adscrito a la Presidencia Municipal, Daniel Guzmán Cruz de quien hablaron muy bien en las oficinas de la alcaldía, gana de salario bruto 82 952.20 pesos mensuales y de salario neto con impuestos aplicados sólo 70 mil 405. 21 pesos, no se sabe que coordina, pero ese es su sueldo, total la bondad del alcalde le hace repartir sin miserias el dinero de los macuspanenses.
Oficialmente en los documentos, la directora de Medio Ambiente y Desarrollo, Andry Selene Rodríguez Ruiz tiene un salario bruto asignado por el alcalde Díaz Falcón de 121 mil 157.05 con, mientras que ya con las deducciones de ley, sólo cobra un salario mensual de 98 mil 959.1 pesos; bueno, Gaspar Díaz considera que ella trabaja más que el gobernador y debe ganar casi 9 mil pesos más que Javier May.
El coordinador Carlos Mario Rojas Zurita -no el director- de la Dirección de Obras Ordenamiento Territorial y Servicios Municipales, tiene un “modesto” salario bruto de 115 mil 597.14 pesos, aunque ya con impuestos aplicados sólo le quedan por su “ardua labor” de mandar a recoger la basura debe ganar bien y gana 95 mil 405.21 pesos, 5 mil pesos más que el gobernador de Tabasco.
Por su parte, el sub director -no el director- de la Dirección de Finanzas, Eric Zacarías de la Cruz dice textualmente el documento: tiene un monto de remuneración mensual bruta de 139 mil 936.80 pesos, ya después que Hacienda le cobra sus impuestos sólo le queda un diminuto sueldo neto de 113 mil 230.68 pesos, 23 mil pesos más que el Ejecutivo Estatal. Hay quién piensa que May Rodríguez debería ir a pedirle un trabajito por las tardes a don Gaspar Díaz.
En la Dirección de Administración, el programador analista, Demofilo Rodríguez Subiaur -dicen que es líder sindical- tiene una percepción bruta mensual de 92 mil 092.87 pesos, ya después de pasar el filtro de los impuestos a este pobre programador analista sólo le queda un decoroso salario mensual de 85 mil590.52 pesos; eso aseguran los documentos oficiales y muchos se preguntan ¿Cómo puede defender los intereses de sus sindicalizados cuándo tiene sus propios intereses al servicio de don Gaspar? Dijera Roberto Madrazo: “Lo que se compra con dinero es barato”.
Si de algo no se puede señalar al alcalde Gaspar Díaz Falcón es que sea mezquino o cicatero, eso lo puede decir abiertamente la directora de Atención a las Mujeres, Holiday Hernández Córdova quien tiene un sueldo bruto mensual de 155 mil 303.84 pesos, aunque ya con los descuentos de rigor, apenas y le queda un sueldo neto de 123 mil959.1 pesos. La dama gana por atender quejas, peticiones y lamentos de las mujeres del municipio 33 mil pesos más que el hombre de las guayaberas arremangadas.
Dados los esfuerzos por entregar agua de excelente calidad a sus gobernados, el alcalde Gaspar Díaz ha puesto toda su confianza en la coordinadora general, Josefa Rodríguez Mondragón y gracias a todo ese trabajo que la sociedad agradece por recibir agua -casi electro pura-, los documentos oficiales dicen que tiene una remuneración bruta mensual de 146 mil 904.28; sin impuestos se le reduce el salario a 118 mil 959.1 pesos. Uf, para algo le alcanzará.
Al titular de Transparencia, Jorge Guzmán Morales, adscrito a la presidencia municipal el monto de la remuneración mensual bruta es de 109 mil 664.23 pesos, claro que ya con los impuestos descontados este titular de Transparencia, apenas rebasa al gobernador Javier May ya que su remuneración mensual neta queda en 90 mil 405.21 pesos; es decir, le gana en salario al gobernador en 405 pesos.
La cuñada de la alcaldesa, Nelly Aguirre Rodríguez desde una coordinación del DIF cobra mensualmente su remuneración bruta de 63 mil 742. 64 pesos, aunque ya después de haberle aplicado los impuestos, sólo le quedan 55 mil 405.21 pesos mensuales. Ella tiene un salario decoroso, su único pecado es ser familiar y por lo tanto ejemplo del nepotismo con que se viola la Ley de Responsabilidades de Servidores Públicos. No mucho, sólo eso
En la Coordinación de Comunicación Social adscrita a la presidencia municipal, don Jesús de la Rosa Sánchez -casi hermano de don Gaspar Díaz- tiene un salario mensual bruto de 92 mil 060. 67 pesos; mientras que ya con impuestos aplicados sólo le queda una remuneración mensual neta de 77 mil 405.21 pesos; algo es algo.
*Por ahora, hasta aquí, que cada quién comparé lo que en realidad cobra y lo que dicen sus documentos oficiales que cobra, no vaya ser que les estén haciendo de “chivo los tamales”; aunque esto es apenas una parte de la punta del iceberg, la terca realidad impone que no llegaron a servir sino a servirse, aunque bien le dijera uno de ellos que cobra y “come con manteca” al columnista ¿A quién le dan pan que llore?
Desde su perspectiva, es correcto ver el cinismo cabalgar por los pasillos del ayuntamiento de Macuspana ante el descontrol total en que el presidente municipal Díaz Falcón envuelto en sus vicios y pasiones parece no darse cuenta; al parecer es innegable que tienen el presupuesto público cómo un “cuerno de abundancia” y para ellos es inagotable el nepotismo y la corrupción en Macuspana.
