Armagedón: Tenosique, absurdo remedo de Sodoma y Gomorra

Sandra Hernández Jiménez, alcaldesa de Tenosique es una señora a la que el pueblo “le dio la confianza” y mediante sus alianzas con los ex alcaldes, Raúl Gutiérrez Cortes alias “El Colorado” y Jorge Suárez Moreno quienes fueron los que impusieron y se repartieron la mayoría de los cargos del gabinete municipal, son al final quienes los que tras bambalinas mal gobiernan; para acabarla, la señora alcaldesa tiene pegado en la espalda cuál eslabón al consorte incómodo y su familia por los cuales nadie votó

Puestas las cosas de esta manera -comenta, -frío y seco-, un estimado anciano de la Iglesia Nacional Presbiteriana de Tenosique durante una deliciosa merienda: es normal que la “pequeña Sandra”, -así dijo- “vaya cometiendo torpezas en su desgobierno y dando traspiés; lo sucedido en el carnaval y ahora en la pesca del robalo, es síntoma que ella no gobierna y cuando sale a la luz, lo hace bajo el disfraz de sentirse como bien dicen, como la “Pochovera Guzmán”, la imitación más provinciana de Alejandra”

Un político amigo y tercer personaje en la mesa refutó: “no la dejan trabajar, la tienen con cuñas que se lo impiden; además, los peores grilletes los tiene desde su hogar: Naum y sus hermanos son una verdadera plaga egipcia dedicados a las “ollas de caldo gordo”; es decir, todos, entre “el colorado, Jorge Suárez y los negocios que están haciendo, por un lado”, los abusos de poder injustificados de sus cuñados y los ridículos que Naum le hace cometer, están llevando a Sandra al abismo”

Incómodo, ante su oloroso café, refiere el anciano de la Iglesia Nacional Presbiteriana: “Me causa tristeza ver en lo que se ha convertido en tan poco tiempo, le ha dado la espalda a Dios, porque todos teníamos confianza que Tenosique ahora sería diferente, porque Sandra llegó cobijada de la iglesia, cuando menos con esa bandera trabajó en campaña. Nosotros ya ni siquiera tenemos acceso a ella, cómo iglesia que la ama, sólo nos queda orar por ella y toda su familia, es lo único que podemos hacer”

Dubitativo, fue más allá en su reflexiva confesión: “cuando Sandra logró la victoria, unidos, pastores y pueblo de Cristo hicimos una acción de gracias; oramos por ella y su familia y el presbítero con extrema prudencia aconsejo a su esposo Naum: en público, la misión de Sandra es gobernar y tú como su esposo, sólo debes ser ayuda idónea, auxiliarla para que su labor sea de gran bendición”. Y añadió, expresiones de dolor que por respeto no se comentarán

Irritado, soltó a bocajarro: “Sandra dentro de la esfera de poder de su alcaldía, no ve que -su juguete nuevo, es temporal- sólo dura tres años, que ya lleva seis meses y con sus apariciones en público y las contrataciones de artistas de narco corridos o el último, el que trajo ahora, ella no vio en que la pantalla que está atrás del promocional de ese sujeto; el tal DJ,  ¡Tiene personas literalmente encueradas enseñando las nalgas y que ese perverso está incitando al exhibicionismo y el cuerpo de mujeres como consumo en pleno mes de la mujer!”

La noche que se sintió la “Pochovera Guzmán” –decenas aseguran que alcoholizada, no lo dice el columnista-; lo cierto, en su defensa dicen que porque le gusta “el karaoke”; sin embargo, en público ella es la máxima autoridad del municipio y el video ilustra que no pudo imitar siquiera a Dolores Janney Rivera o Jenni Rivera, quizás como dijera el político tenosiquense que la conoce más: “ya happy se siente Teresa, “la Reina del Sur”, Kate del Castillo y ve a Santiago López en su amado Naum

Ubiquemos: doña Sandra fue votada para gobernar con seriedad como alcaldesa y ser ejemplo sano de valores y principios morales, no para hacer desfiguros públicos que ofenden a su propia investidura; ella como maestra, debería dimensionar que si ella misma no se respeta y comporta con la seriedad que el cargo obliga: que luego no se queje cuando nadie la respete; porque si bien es cierto, que para la gente del populacho que remede canciones es “pan y circo”; para los tenosiquenses serios, el cargo obliga a proyectar una imagen de respeto, que despierte, aterrice y deje de sentirse la Jenni Rivera o la Kate del Castillo de Tenosique

Entendamos: para la clase política y la mayoría de la barra ministerial y la feligresía de la Iglesia Nacional Presbiteriana que son gente dedicada a Dios, que confió en ella, no aprueban todo ese tipo de ridiculeces; lógica simple, quienes no viven bajo la esclavitud de los vicios que están siendo fomentados desde el poder político, observan claramente que la alcaldesa al contratar un espectáculo tan denigrante dónde se exhiben traseros de mujeres semidesnudos remeneándose lujuriosamente, está degradando los valores morales y induciendo a Tenosique al más absurdo y vulgar remedo de Sodoma y Gomorra

Compromiso es compromiso y “los compromisos se cumplen”, dice el gobernador Javier May. Para lograr que el anciano de la Iglesia Nacional Presbiteriana de Tenosique se expresará tan abiertamente, el columnista se comprometió a hilar una entrega apegada a la doctrina cristiana que la alcaldesa tuvo en parte de su existencia, ya que, por estar sufriendo los estragos de las alegres fiestas sabatinas, -dice este apóstol de la Palabra-: “ya ni asiste a la iglesia”, se olvido que Jesús dijo: “Lejos de Mí, nada podéis hacer”. No tarda el columnista en cumplir su parte

Con la seriedad que amerita este tipo de situaciones; debemos ubicar que desde principios del carnaval en este espacio se dio la voz de alerta que se estaba fomentando un libertinaje ofensivo que abarcaba la exhibición de un homosexualismo que espantó a la iglesia a la que pertenecía la alcaldesa y desde esos mismos lugares de limpieza moral ubicaron que en mucho que esos deslices era fomentados por la cultura de los narcocorridos del consorte Naum. “Un pecado llama a otro” dice la Palabra y donde no hay valores morales, virtud, santidad o integridad hay depravación

Con miras a la segunda edición de Armagedón digital, el equipo de trabajo ha comenzado a revisar documentos de este municipio entregados en la mesa de redacción; en lista de espera, las penosas condiciones en que son atendidos los pacientes del Hospital de Alta Especialidad del Juan Graham en el área de hemodiálisis. Aunque hay que reconocer que en el Sector Salud se trabaja con todo a marchas forzadas, el abandono de Silvia Roldan fue de tal magnitud que los estragos son lastimosamente evidentes